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En tiempos de guerra Longreads

Así es Ucrania: la resistencia en Crimea nunca ha cesado

Desde el 26 de febrero de 2020, Ucrania ha conmemorado oficialmente el Día de la Resistencia a la Ocupación de la República Autónoma de Crimea y la ciudad de Sebastopol. Hace 10 años, en 2014, en la mañana del 26 de febrero, 15 mil habitantes de Crimea acudieron a la Verkhovna Rada de la República Autónoma de Crimea para detener la ocupación rusa de la península.

La manifestación pacífica tuvo éxito: la reunión sobre el llamado “referéndum” sobre la separación de Crimea de Ucrania no se celebró aquel día. El 27 de febrero, Rusia tuvo que pasar a la fase armada de la ocupación.

El 26 de febrero, fue conmemorado como el Día de la Resistencia, pero desde entonces la resistencia nunca ha cesado y, con el inicio de la invasión a gran escala el 24 de febrero de 2022, no ha hecho más que intensificarse.

Los activistas del movimiento “Lazo amarillo” despliegan la bandera ucraniana en las montañas de Crimea el Día de la Resistencia a la Ocupación. 26 de febrero de 2024. 
Foto: Lazo amarillo

En la península comenzaron a operar los movimientos clandestinos a gran escala en apoyo de Ucrania, que las administraciones de ocupación siguen tratando de reprimir, dictando “sentencias” ilegales a los ciudadanos ucranianos incluso por postear las canciones ucranianas en las redes sociales o decir “Gloria a Ucrania” en medio de la ciudad. Desde multas hasta 20 años de prisión ilegal en casos falsificados, Rusia utiliza todos los métodos que empleaba en la época soviética.

26 de febrero de 2024. Simferópol

La ocupación rusa de Crimea fue planeada de antemano. Con los Juegos Olímpicos de 2014 en Sochi como telón de fondo, los ciudadanos rusos, representantes de las empresas de seguridad y unidades paramilitares rusas se trasladaron a la península. Se disfrazaron de habitantes de Crimea y participaron en las manifestaciones callejeras, en las que supuestamente “residentes de la península” exigían la separación de Ucrania.

El 25 de febrero de 2014, 400 activistas “prorrusos” intentaron bloquear el Parlamento de Crimea, exigiendo que la península “se uniera a Rusia.”

En la mañana del 26 de febrero, a convocatoria del Mejlis del pueblo tártaro de Crimea (el órgano representativo de los tártaros de Crimea), miles de personas se reunieron frente al Parlamento de Crimea en Simferópol. La manifestación pacífica se celebró en apoyo de la integridad territorial de Ucrania y tenía por objetivo cancelar una reunión de la Verkhovna Rada, que tenía previsto adoptar una decisión sobre el llamado “referéndum” acerca de la secesión de Crimea de Ucrania.

La sesión de la Verkhovna Rada de Crimea fue aplazada, y Rusia tuvo que pasar a un “escenario militar” de ocupación de la península. En la noche del 27 de febrero, las tropas rusas sin insignias (los llamados “hombrecillos verdes”) tomaron el edificio del gobierno de Crimea. También tomaron el control del parlamento de Crimea. Estos fueron los primeros actos no disimulados de agresión armada de Rusia.

Después de eso, las fuerzas de seguridad rusas en Crimea comenzaron a perseguir a los activistas y participantes de la manifestación que tuvo lugar el 26 de febrero.

Resistencia bajo la ocupación

Tras la toma de edificios administrativos por los militares rusos, los ciudadanos de Crimea empezaron a organizar diversas protestas y manifestaciones para expresar su postura.

“Las mujeres de Crimea defienden la paz”. Marzo de 2014

En muchas ciudades y pueblos de Crimea se celebraron las acciones pacíficas de mujeres denominadas “Mujeres de Crimea en defensa de la paz”. En las protestas contra la ocupación participaron sobre todo mujeres con niños. Se alineaban a lo largo de las carreteras en columnas improvisadas de 50-100 personas, desplegando carteles y llevando consigo banderas ucranianas y tártaras de Crimea.

Una de estas acciones tuvo lugar el 6 de marzo cerca del cuartel general de la brigada de defensa costera de la marina ucraniana en Simferópol, cuya entrada estaba bloqueada por los soldados rusos sin distintivos de identificación. Ese día, las fuerzas de ocupación intentaron dispersar por la fuerza a las mujeres, empujándolas lejos de la puerta de la sede.

Protesta con motivo del cumpleaños de Taras Shevchenko. 9 de marzo de 2014

El 9 de marzo de 2014 en Simferópol y Sebastopol se celebraron las actividades dedicadas al 200 aniversario del nacimiento del poeta ucraniano Taras Shevchenko. La gente acudió con las banderas ucranianas, interpretó las canciones ucranianas y recitó las poesías en un escenario improvisado.

Las tropas rusas sin insignias intentaron interrumpir la acción, provocando enfrentamientos con otros participantes. Ese día fue detenido Mykola Shiptur, primer preso político de Crimea y participante activo en la Revolución de la dignidad. En mayo de 2015, el tribunal de ocupación le acusó de portar supuestamente “armas y ácido”. El hombre fue condenado ilegalmente a 9 años en una colonia de régimen estricto.

Alrededor de 300 ciudadanos de Crimea se reunieron en la manifestación. Marzo de 2014.
Foto: Volodymyr Prytula.

Manifestaciones de toda Crimea en apoyo a Ucrania y contra el “referéndum”. 14 de marzo de 2014

El 14 de marzo, en muchas ciudades y pueblos de Crimea, la gente se reunió en manifestaciones de apoyo a la integridad territorial de Ucrania, formando “cadenas humanas.” El 16 de marzo iba a celebrarse en Crimea un “referéndum” ilegal sobre la adhesión de la península a Rusia. Los manifestantes esperaban perturbar la situación e impedir que se celebrara la “votación”.

Una anciana con un cartel “Crimea es Ucrania” en una concentración de todos
los habitantes de Crimea contra el así llamado “referéndum”. Marzo de 2014.
Foto: Reuters

Los manifestantes no lograron su objetivo, y el llamado “referéndum” se celebró el 16 de marzo. Los votantes fueron obligados a participar a punta de pistola, en violación del derecho internacional. Ya el 18 de marzo, Rusia declaró Crimea parte de su país, a pesar de que la comunidad internacional y el derecho internacional lo han reconocido como un hecho ilegal.

Los ciudadanos ucranianos empezaron a abandonar la península ucraniana en masa, muchos de ellos por motivos de seguridad. Los tribunales de ocupación empezaron a dictar “sentencias” ilegales contra los ciudadanos en casos falsificados. A menudo, las “confesiones” se obtenían de los detenidos mediante torturas o amenazas.

En mayo de 2014, las fuerzas de seguridad rusas detuvieron a Oleh Sentsov, cineasta, escritor y activista ucraniano, cerca de su casa en Simferópol. Según Sentsov, le llevaron a la antigua oficina del Servicio de Seguridad de Ucrania con una bolsa en la cabeza, donde le golpearon, estrangularon e interrogaron durante unas 4 horas. El 19 de mayo, el hombre fue trasladado ilegalmente a un centro de detención preventiva de Moscú, donde fue acusado de un caso llamado “caso de los terroristas de Crimea”. Fue condenado a 20 años en una colonia de régimen estricto.

Gracias a la atención de la comunidad internacional, a miles de publicaciones en los medios de comunicación y a las acciones organizadas de apoyo al director en Ucrania, fue liberado al cabo de cinco años y devuelto a Ucrania en un intercambio de prisioneros.

Tras el inicio de la invasión a gran escala, Oleh Sentsov se alistó en las filas de las Fuerzas Armadas ucranianas. Octubre de 2023.
Foto: Oleh Sentsov/Facebook

Todos los demás “casos judiciales” en Rusia siguieron un esquema similar: detención de un ciudadano con una clara posición pro ucraniana, falsificación del caso contra él, extracción de una “confesión” bajo torturas y emisión de una “sentencia.”

El 9 de abril de 2016, los familiares y amigos de presos políticos, abogados y activistas crearon el movimiento público “Solidaridad con Crimea” para proteger a las víctimas de la represión política rusa y apoyarse mutuamente. El movimiento celebró eventos informativos, y los participantes se reunieron en mítines cerca de los edificios de los “tribunales” para apoyar a los detenidos. El movimiento no hizo más que crecer durante los años de ocupación, y al mismo se unieron las personas de diferentes profesiones, nacionalidades y religiones.

Activistas del movimiento público “Solidaridad con Crimea”.
Foto: página web de la organización no gubernamental “Solidaridad con Crimea”

Uno de los casos más sonados antes de la invasión total fue la detención en septiembre de 2021 de Nariman Dzhelal, vicepresidente del Mejlis del pueblo tártaro de Crimea, y de los hermanos Asan y Aziz Akhtemov, periodistas y activistas.

Nariman Dzhelіal fue detenido inmediatamente después de participar en la Cumbre inaugural de la Plataforma de Crimea, que tuvo lugar el 23 de agosto de 2021, con la participación del Presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy. Además, apoyó activamente a las familias de los presos políticos de la Crimea ocupada, participó en las actividades periodísticas para desvelar los crímenes de la ocupación, participó en las manifestaciones por los derechos de las personas detenidas ilegalmente y defendió la cuestión de los presos políticos en diversas plataformas internacionales.

Nariman Dzhelial en la Cumbre inaugural de la Plataforma de Crimea. Agosto de 2021.
Foto: La plataforma de Crimea

Las tres personas condenadas ilegalmente fueron torturadas con descargas eléctricas, llevadas con bolsas sobre la cabeza supuestamente para su “ejecución” y sometidas a presiones físicas y morales. Nariman Dzhelial y los hermanos Asan y Aziz Akhtemov fueron acusados de presunto “sabotaje” y condenados a 20, 15 y 13 años, respectivamente, en una colonia de máxima seguridad.

Hasta el 19 de febrero de 2024, los tribunales de ocupación han encarcelado ilegalmente a 208 ciudadanos ucranianos, 125 de los cuales son tártaros de Crimea.

Nariman Dzhelial y los hermanos Aziz y Asan Akhtemov en una vista del tribunal de ocupación.
Foto: Elmaz Qirimkh

La invasión a gran escala provocó una resistencia a gran escala

Desde el 24 de febrero de 2022, la resistencia en Crimea se ha generalizado, desde las acciones aisladas de oposición hasta los movimientos con miles de participantes. La población de Crimea resiste difundiendo información y buscando formas de ayudar al ejército ucraniano.

Lazo amarillo

El movimiento de resistencia “Lazo amarillo” apareció por primera vez en los territorios de Ucrania ocupados tras el 24 de febrero de 2022, pero más tarde se extendió a Crimea. Sus métodos no son violentos y se basan en la difusión de información: pegar carteles con las palabras “Crimea es Ucrania”, “Esperamos a las Fuerzas Armadas” y similares, atar lazos amarillos en lugares públicos y pintar los símbolos ucranianos con pinturas amarillas y azules en las paredes de los edificios.

En noviembre de 2023, los activistas del Lazo amarillo consiguieron colgar la bandera ucraniana en la montaña Boyko en Crimea. La tela azul y amarilla recordaba a los habitantes de Crimea que Ucrania espera a Crimea y lucha por ella.

Ateş

Ateş (“Fuego” en tártaro de Crimea) fue creado en septiembre de 2022. Es un movimiento guerrillero de ucranianos y tártaros de Crimea. El movimiento cuenta actualmente con unos 1800 miembros.

Dado que Rusia ha extendido la movilización criminal entre los ciudadanos ucranianos de Crimea, obligándoles a unirse a las Fuerzas Armadas rusas e ir a la guerra, los participantes de Ateş decidieron que combatirían al agresor desde dentro. Organizan sabotajes en los depósitos militares, pasan la información a los militares ucranianos, queman el material enemigo, atacan a los colaboradores y sabotean las vías de ferrocarril utilizadas por Rusia para transportar sus armas.

Slava Natsii (Gloria a la nación)

El movimiento de resistencia “Gloria a la Nación” comenzó sus actividades incendiando los coches de colaboradores con los símbolos rusos en Feodosia. Lucha sobre todo contra las autoridades prorrusas de Crimea que cometen crímenes contra los ciudadanos ucranianos.

La Mavka malvada

En Melitopol, región de Zaporizhzhia, ocupada después del 24 de febrero de 2022, surgió un movimiento de resistencia de mujeres que luego se extendió a todos los territorios temporalmente ocupados. Actualmente, cuenta con más de 500 miembros activos, la mayoría de ellos en la Crimea ocupada. Las mujeres difunden los mensajes pro ucranianos en las ciudades de la península, folletos y carteles de apoyo a las Fuerzas Armadas y a Ucrania.

Cuando Rusia lanzó la guerra a gran escala contra Ucrania, el Estado agresor también añadió un nuevo artículo a su Código Penal “sobre la discriminación contra las Fuerzas Armadas rusas” para reprimir cualquier resistencia. La mayoría de las condenas en virtud de este artículo fueron registradas en la Crimea ocupada. Hasta el 19 de febrero de 2024 se han registrado 665 casos de sumisión a los “tribunales” de ocupación.

Sin embargo, a pesar de ello, los residentes de la Crimea ocupada temporalmente siguen luchando de todas las formas posibles. La historia más publicitada fue la de Bohdan Ziza, artista y activista de Crimea.

El 16 de mayo de 2022 salpicó con la pintura azul y amarilla y presuntamente intentó prender fuego a las puertas de la “administración” de ocupación de Yevpatoria, en protesta por la guerra de Rusia contra Ucrania. Fue detenido al día siguiente y condenado a 15 años en una colonia de máxima seguridad en 2023.

A lo largo de los años de ocupación, la multicultural y multirreligiosa Crimea, con sus paisajes únicos, se ha convertido en un trampolín para los crímenes de guerra de Rusia, donde ni el medio ambiente, ni la cultura, ni la gente importan al país agresor. Esto no impidió que ucranianos y tártaros de Crimea siguieran luchando por sus derechos y libertades. Dibujos azules y amarillos, banderas, canciones y lemas ucranianos, tatuajes con emblemas nacionales, paso de información a las Fuerzas Armadas ucranianas… las formas de resistencia son variadas, pero son muchas.

Cada una de estas acciones es una forma de recordarnos que Crimea es Ucrania. Lo fue y lo será. Los activistas siguen luchando por su libertad, organizando las acciones individuales de resistencia o uniéndose en grupos. También hay ejemplos de los ciudadanos que viajaron a través de terceros países para llegar al territorio de Ucrania continental y unirse a las Fuerzas Armadas ucranianas. Cada uno lucha a su manera, y Ucrania sigue luchando por Crimea y su pueblo.